El objetivo principal de esta práctica es el de generar y fortalecer una conexión entre el ser humano y el universo. La palabra proviene de “jug” que en sánscrito significa “conectar, unir, relacionar”.

Con las posturas, la respiración adecuada y los movimientos que se realizan en esta actividad, se logra una armonía perfecta entre físico y espíritu.

Es complicado concretar el momento exacto en que esta práctica nació, dado que en sus orígenes, era de transmisión oral y los textos ancestrales de la cultura no son descifrables. Lo que sí podemos saber, es que pertenece a la cultura de la India. Igualmente, se estima que las primeras formas del Yoga datan entre los años 10.000 y 5.000 a.C.

En un principio, se creía que los ejercicios eran mucho más duros para el cuerpo y los sentidos, dado que la premisa era la apropiación del poder de los Dioses. Con los años, esos ejercicios evolucionaron, tornándose más suaves. Las distintas formas del Yoga, se encuentran escritas en el Yoga sūtra, con las reglas de esta práctica. De allí, derivaron otras órdenes de yoguis (denominación para quienes practican esta actividad). Luego, esta práctica se esparció por todo el mundo.

Actualmente, es una práctica que eligen millones de personas en todos lados, dado que se trata de una combinación perfecta para equilibrar mente y cuerpo. Con sus posturas, permite conseguir un desarrollo y control de la musculatura y la flexibilidad del cuerpo, de manera armoniosa.

Podríamos decir que el punto a destacar del Yoga es la meditación, dado que es una de las pocas prácticas que incluye meditaciones constantes, que permiten la absoluta concentración con nuestro interior y el entorno circundante. Solución ideal para los problemas que acarrea el Siglo XXI, dado que nos permite controlar los niveles de ansiedad, al mismo tiempo que mejora la salud física y mental.

Existen diferentes formas de Yoga, dentro de las cuales, las más conocidas son el Vinyasa, Nidra y Hatha.

Pero no importa cuál, todas contemplan tres pilares fundamentales:

  • Respiración y Control: Fundamental la concentración en la respiración. Se realizan ejercicios de respiración durante toda la práctica.
  • Conexión Corporal (Posturas): A través de una serie de movimientos, posiciones o posturas del yoga, aumenta la fuerza, el equilibrio y la flexibilidad. Existe una gran variedad de dificultad.
  • Calma y Armonización de la Mente (Meditación): Toda clase de Yoga, termina con una breve meditación para la relajación y calma mental.

Podemos resumir que esta práctica, más que una simple actividad física, se convirtió en un estilo de vida para quienes la realizan. No se trata de una simple rutina, dado que contempla todo un estilo saludable alrededor. Se convirtió en la práctica ideal para armonizar holísticamente nuestro organismo!

Entre los beneficios de la práctica del Yoga podemos mencionar:

  • Aptitud Física y Armonía Corporal: Esta práctica permite obtener una buena condición física, además de complementarse con lo emocional y mental.
  • Pérdida de Peso: A través de ciertas posturas, como el Saludo al Sol, y de respiraciones abdominales, se logra perder peso. En adición, al tiempo de realizar Yoga, la mayoría de sus practicantes se vuelven más sensibles sobre su alimentación, lo que permite un control mayor del peso.
  • Alivia Tensiones y Contracturas: Al ser un método natural que deshace las tensiones diarias, con sus posturas y respiraciones, se libera el estrés terminando con las contracturas y las tensiones en cuello, articulaciones y espalda.
  • Brinda Paz Interior: Es la herramienta más efectiva para calmar una mente perturbada. Luego de una serie de posturas corporales, notarás tu mente más tranquila y preparada para meditar.
  • Fortalecimiento del Sistema Inmunológico: Dado que somos una combinación entre mente, cuerpo y espíritu, todo está conectado. Por eso mismo, una mente inquieta y perturbada, puede decantar en enfermedades físicas. Las posturas del Yoga masajean los órganos del cuerpo, además de fortalecer el sistema muscular al mismo tiempo que calma la mente y tranquiliza el espíritu. Al tener un sistema en armonía, nada falla y la inmunidad crece.
  • Vivir con Mayor Conciencia: El Yoga es la práctica que nos trae al momento presente, generando un mayor estado de concentración y alerta.
  • Mejora Relaciones Sociales: Una mente feliz y relajada, afronta las situaciones y relaciones diarias de manera sensible. Se nota un elevado positivismo y energía, que se vuelve contagioso!
  • Aumenta la Energía: Aunque se practique por unos pocos minutos, la relajación de la mente y estirar el cuerpo, permiten recuperar la frescura y energía corporal al instante.
  • Flexibilidad y Mejor Postura: Dado que estira, fortalece músculos y tonifica, es ideal para la mejora de aquellos con problemas de postura.
  • Mejora la Intuición: Con las posturas y la meditación final, aumenta y mejora la capacidad intuitiva del practicante.

Además, reduce la presión arterial y la frecuencia cardíaca, mejora la confianza interior, ayuda a la relajación, mejora la coordinación mediante las distintas posturas, además de fomentar y mejorar la concentración.  Por otro lado, se notan cambios en el sueño, logrando un mejor dormir, bajando (o anulando directamente) el nivel de ansiedad, dolores y posibles cuadros depresivos.

A través de las Asanas (posturas) y las Pranayamas (técnicas de Respiración), en combinación perfecta con la Meditación, se logra una completa armonía corporal como con ninguna otra actividad.

Es muy importante mantener el equilibrio entre los 3 pilares que nos componen: Cuerpo, Mente y Espíritu. Sin dudas, el Yoga es la mejor opción para complementarlos! Para más información sobre las clases de Yoga en el Club, escribinos a: atencionalsocio@clubsantabarbara.com.ar